Fabiola Naranjo: “En el colegio aprendí el respeto a la vida”
A través de una serie de entrevistas, buscamos poner en valor la educación con sello Spínola, en relación a la apertura a los demás, el cuidado del otro, del entorno, de la vida.
El compromiso de Fabiola Naranjo, antigua alumna del colegio La Asunción de Montilla, está relacionado con el cuidado de la tierra. Ella está estrechamente comprometida con la misión de velar por la casa común y trata de inculcar esta visión a su entorno a través de sus propios actos, su testimonio. Es bióloga y trabaja en formación para el Colegio Oficial de Biólogos de Andalucía.
¿Qué aspectos de tu aprendizaje en nuestro colegio crees que te han abierto la mirada al cuidado de la tierra?
En el colegio aprendí el respeto a la vida, sin duda, aparte de recibirlo en la formación a través de mi familia. Desde la educación se me inculcó más cariño y respeto al medio ambiente, y también a la gente que te rodea. Ahora, con el paso de los años, considero que sigue siendo importante esa sensibilidad y yo deseo transmitirlo a mis hijos, al tiempo que ellos lo reciben de una forma más intensa, si cabe, en el colegio donde se forman.
¿Cómo recuerdas tu etapa en el colegio La Asunción de Montilla? ¿Qué es lo que más te marcó en ese tiempo?
De una forma muy entrañable, era para mí como una segunda casa. Por eso cuando llegó el momento de pensar a qué colegio llevar a mis hijos, no dudé, porque quería que ellos vivieran el mismo ambiente familiar y cercano que yo viví. Es curioso, porque durante muchos años de mi vida no visité el colegio pero cuando volví me sentí igual que si no hubiera pasado el tiempo, seguía existiendo un clima familiar y cercano.
¿Cómo defines el centro y la experiencia educativa allí?
Destacaría la cercanía con los alumnos y con las familias, el cariño del equipo, el trato personal que se da y que creo que no sucede en otros centros. Siempre se mira las peculiaridades de cada alumno para adaptarse a sus necesidades. También destacaría que, a nivel físico, el propio edificio es un espacio histórico y enriquecedor para los alumnos. A través de él conocen la historia de Montilla y han hecho varios proyectos sirviéndose del edificio como hilo conductor.
¿Cuál crees que es el “sello Spínola” que deja el paso por nuestros colegios?
El lema de “la pedagogía desde el corazón”, creo que es bastante representativo de cómo se educa en el colegio. Creo que se vive muy presente la cercanía y el cariño para con los niños y que provoca que entre ellos también se cuiden más.
En nuestra memoria del curso pasado puedes leer más testimonios como este.
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